Energy development of residual biomass constituted by straw from cereals

  1. Esperanza Mateos Sánchez
  2. Ana Elías Sáenz
Libro:
X Congreso Internacional de Ingeniería de Proyectos: Valencia, 13-15 Septiembre 2006. Actas

Editorial: edUPV, Editorial Universitat Politècnica de València ; Universitat Politècnica de València

ISBN: 84-9705-987-5

Año de publicación: 2006

Páginas: 1378-1385

Congreso: CIDIP. Congreso Internacional de Ingeniería de Proyectos (10. 2006. Valencia)

Tipo: Aportación congreso

Resumen

Tradicionalmente las biomasas vegetales, residuales o no, han constituido el combustible tradicional de la humanidad. Incluso hoy en día, más de 1.500 millones de personas dependen de estos residuos para satisfacer sus necesidades energéticas. Con el uso masivo de combustibles fósiles el aprovechamiento energético de la biomasa fue disminuyendo progresivamente y en la actualidad presenta en el mundo un reparto muy desigual como fuente de energía primaria. No obstante, en los últimos años el panorama energético mundial ha variado notablemente. El elevado coste de los combustibles fósiles y los avances técnicos que han posibilitado la aparición de sistemas de aprovechamiento energético de la biomasa que permiten la obtención de energía directa o indirectamente mediante procesos de combustión, pirólisis o gasificación. Dichos sistemas de aprovechamiento son cada vez más eficientes fiables y limpios, por este motivo, se ha empezado a considerar a la biomasa como una alternativa, total o parcial, a los combustibles fósiles. De acuerdo con las estimaciones realizadas para la elaboración del Plan de Fomento de las Energías Renovables en España, la biomasa representa el 53’8% (3.792 ktep) del consumo en energía primaria de origen renovable incluida toda la hidráulica, o el 89.1% de todas las renovables excluyéndola. El Plan de Fomento de las Energías Renovables propuesto para España, aprobado por el gobierno el 31 de diciembre 1999, basa su propuesta en un incremento de 90’2 Mtep obtenidos a partir de la biomasa, lo que representa el 74’4% del incremento global de la energía primaria aportada por todas las renovables. También en este Plan se considera una participación muy importante de los cultivos energéticos para la producción de biomasa, estando prevista la utilización de más de 800.000 ha de tierras de secano para la producción de 3’35 Mtep de biocombustibles sólidos.