Efecto de la gastrectomía vertical laparoscópica en la expresión y metilación del adn de genes relacionados con el metabolismo energético y la inflamación en leucocitos de sangre periférica

Resumen

La obesidad induce alteraciones del metabolismo energético y las vías de la inflamación, con consecuencias graves a nivel sistémico. La gastrectomía vertical laparoscópica (GVL) es la técnica bariátrica más habitualmente usada a nivel mundial, pero poco se conoce de los cambios que provoca a nivel molecular. El presente estudio tuvo como objetivo analizar, en leucocitos de sangre venosa periférica (LSP) de una cohorte de pacientes bariátricos, los efectos de la GVL sobre la expresión y la metilación del ADN de una serie de genes relacionados con la inflamación y el metabolismo energético. Entre julio 2013 y junio 2014, se obtuvieron muestras de un grupo de pacientes obesos con indicación de cirugía bariátrica (n=35) en 3 puntos del proceso de pérdida de peso: antes de recibir ninguna intervención (t0), después de dos semanas de dieta de muy bajas calorías (t1) y a los 6 meses de recibir una GVL (t2). Se extrajo también una muestra de sangre de un grupo control (n=33), compuesto por sujetos delgados y sanos. En todas las muestras, se analizó la expresión en LSP de 12 genes (GHRL, NAMPT, IRS1, FTO, CCL2, TNF, FAS, LEP, PPARG, ADIPOQ, FASN y MC4R) mediante reacción en cadena de la polimerasa cuantitativa. En 6 pacientes y 6 controles, se analizó además el estado de metilación del ADN de los promotores de los genes GHRL, NAMPT y FAS mediante pirosecuenciación por bisulfito. Siete de los 12 genes analizados presentaron expresión detectable en LSP (GHRL, NAMPT, IRS1, FTO, CCL2, TNF y FAS). A los 6 meses de la GVL, se observó un aumento de la expresión de FTO y un descenso de la expresión de FAS y CCL2. El estado de metilación del ADN del promotor de GHRL varió de forma harmónica en los 4 sitios CpG explorados, aumentando tras la dieta y disminuyendo a los 6 meses de la GVL. IRS1 y NAMPT presentaron mayor expresión basal en aquellos pacientes que antes de recibir ningún tratamiento tenían un índice de masa corporal ≥40 kg/m2 y una proteína C-reactiva ≥5 mg/L, respectivamente. No se encontró ningún gen cuya expresión o metilación basal permitiera predecir la evolución del peso ni la resolución de comorbilidades al año de seguimiento tras la GVL.