Los bienes de la sacristía de la catedral de Murciagestión y uso en el siglo XVI

  1. Alegria Ruiz, Francisco Jose
Dirigida por:
  1. María Concepción de la Peña Velasco Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Murcia

Fecha de defensa: 15 de abril de 2021

Tribunal:
  1. Gaetano Sabatini Presidente/a
  2. María Lorena Marín Torres Secretario/a
  3. José Javier Vélez Chaurri Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

RESUMEN Esta tesis pretende ahondar en el conocimiento histórico-artístico sobre la Catedral de Murcia de la Diócesis de Cartagena en el aspecto concreto de los bienes de la sacristía en el siglo XVI. Se estudia su gestión a través de la documentación, y no tanto las piezas, que en su mayor parte no se han conservado. Se articula en tres bloques. El primero está destinado a los bienes de la sacristía como tales, pretendiendo conocer qué enseres componían el conjunto y abordando cada una de las tipologías y su presencia en la sacristía. El segundo estudia su gestión analizando las numerosas acciones que los prelados y el cabildo llevaron a cabo. En el tercer se centra en el uso ceremonial de los bienes. Para ello se han propuesto los siguiente objetivos: - Examinar la evolución de dicho conjunto a lo largo de la centuria del quinientos. - Analizar la normativa de la que el cabildo se dotaba para control de la colección y examinar las acciones que se llevaron a cabo para su conservación e incremento. - Proponer una categoría de clasificación que tenga en cuenta su función litúrgica y estética. - Valorar la acción de los obispos de la Diócesis de Cartagena sobre el patrimonio de la sacristía. - Reivindicar la gestión de los bienes de la sacristía como ejemplo de gestión de patrimonio eclesiástico. - Poner de relieve la importancia de las ceremonias y ritos sagrados de la catedral y conocer cómo los objetos del ajuar eran utilizados durante las mismas. Un acercamiento a la documentación capitular permite conocer el protagonismo de los bienes de la sacristía. Se han localizado y estudiado los inventarios y se ha presentado el conjunto de estos bienes en el siglo XVI, procurando identificar los distintos objetos que lo componían. Se ha elaborado un criterio de clasificación atendiendo a una doble perspectiva religiosa y artística. A través de la documentación se advierte una gestión organizada por parte del cabildo y los obispos. Se han analizado esas medidas llevadas agrupándolas en un esquema que permita comprender sintéticamente el modelo de gestión. Se han analizado los ámbitos y espacios relacionados con los bienes de la sacristía para profundizar en la comprensión de los mismos. Se han estudiado los actos de culto para conocer el despliegue del patrimonio de la sacristía, organizándolos según las principales ceremonias de la catedral, advirtiendo en ellos el valor estético-simbólico que aportaba cada objeto. Se han deducido ideas especialmente significativas que se han expuesto como conclusiones. 1. El conjunto de los bienes de la sacristía se configura a través de la liturgia. El cabildo pretendía un conjunto completo para satisfacer esas necesidades, queriendo contar con piezas ordinarias y piezas ricas para los días solemnes. 2. El ajuar litúrgico estaba en consonancia con la Catedral de Murcia y la mitra de Cartagena. 3. Los obispos de Cartagena ampliaron considerablemente los bienes de la sacristía de la catedral con significativas donaciones, manteniéndose la tradición medieval de entregar ornamentos textiles. 4. El cabildo desarrolló pautas de gestión a través de la jerarquización de responsabilidades, el control por inventarios, medidas de conservación o el acrecentamiento del conjunto. Estas actuaciones pueden proponerse como antecedente de conservación y gestión de colecciones artísticas de la Iglesia. 5. Sobre el sacristán recaía la responsabilidad inmediata de la colección, especificándose sus funciones en un reglamento aplicado desde el siglo XV. 6. En la segunda mitad del siglo XVI se evidenciará la influencia y la preocupación de los prelados sobre los bienes de la sacristía. 7. La gestión de los bienes de la sacristía y las nuevas necesidades litúrgicas terminaron condicionando determinados espacios y el uso que se hacía de ellos. Igualmente los bienes del ajuar litúrgico fueron capaces de enfatizar simbólicamente los lugares donde se emplazaban. 8. El culto divino adquirió a iniciativa del Concilio de Trento una mayor dignificación material, que se traduce en una mayor atención al ajuar eucarístico, al los ornamentos pontificales y a los de atención pastoral. 9. La unidad y uniformidad que persiguió la implantación universal de los libros litúrgicos de la reforma del Concilio de Trento desembocó en la configuración de conjuntos más completos. Contribuyeron a ello las prescripciones de Sancho Dávila. 10. Con el ajuar litúrgico se quería hacer bello el misterio invisible del culto católico, acentuándose esta intención durante la Reforma Católica. 11. La belleza del rito actuaba como cauce de la enseñanza de la verdad y la doctrina católica.