El árbol de GernikaVicisitudes del símbolo foral de los vascos
ISSN: 1575-0361, 1989-063X
Año de publicación: 2006
Número: 15
Páginas: 23-44
Tipo: Artículo
Otras publicaciones en: Historia y política: Ideas, procesos y movimientos sociales
Resumen
Desde mediados del siglo XIX el árbol de Gernika se convirtió en el principal referente simbólico de los fueros vascos y, por extensión, en la medida en que se fue planteando y recrudeciendo la "cuestión foral", en el símbolo de las "libertades" vascas. La validez simbólica de la propia figura de un árbol como mito de las raíces de un pueblo, la ausencia de otros espacios o símbolos definidos del resto de los fueros vascos (alaveses, guipuzcoanos o navarros) y el inesperado éxito del himno ideado por Iparraguirre en 1853, verdadero fenómeno sociológico de la época, explican su consolidación y su protagonismo indiscutible en las décadas siguientes. La supuesta unanimidad de la defensa foral por parte de todas las fuerzas políticas, permitirá su unánime aceptación como símbolo de lo vasco. Pero esa misma unanimidad, paradójicamente, acabará repercutiendo en las dudas para su aceptación definitiva. Demasiado "fuerista" para los nacionalistas vascos (que prefirieron definir nuevos símbolos y nuevos himnos), aunque sin abandonarlo; excesivamente manipulado por las nacionalistas para otras fuerzas políticas. La guerra civil, y el famoso bombardeo, la dará un nuevo impulso. Pero la ambigüedad del PNV, recuperada la autonomía tras la transición, quedará también reflejada en su tímida recuperación como espacio de conmemoración, pero sin ostentar ninguna oficialidad como símbolo de la nueva Euskadi.