¿Hacia un Estado autonómico desconstitucionalizado?El futuro del modelo territorial español en el marco de la integración europea
- FLÓREZ TURRADO, FRANCISCO JAVIER
- Santiago Larrazábal Basáñez Director/a
Universidad de defensa: Universidad de Deusto
Fecha de defensa: 25 de noviembre de 2011
- Carles Viver Pi-Sunyer Presidente/a
- Aitziber Emaldi Cirión Secretario/a
- Beatriz Pérez de las Heras Vocal
- Marc Carrillo Vocal
- Enrique Lucas Murillo de la Cueva Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
Probablemente la mayor aportación del constitucionalismo español en el pasado siglo haya sido la estructura territorial del Estado. Su singularidad como Estado compuesto ha resultado patente. La Constitución de 1978, que dejaba atrás un Estado centralizado, garantizaba de nuevo las libertades y la democracia, y posibilitaba también una descentralización territorial del poder político. Su modelo territorial, no obstante, ni era único ni estaba cerrado. Como acertadamente plasmara el profesor Cruz Villalón en su ya clásico ensayo sobre la curiosidad del jurista persa, de la lectura de la Constitución no se extraía el modelo de Estado resultante. En efecto, la Constitución de 1978 dejaba en manos de los diferentes territorios la última palabra sobre su constitución como Comunidad Autónoma a través de sus respectivos Estatutos. Por tanto, junto a la Constitución y bajo su imperio, han sido los Estatutos de Autonomía las normas principales para dar forma y sentido al Estado Autonómico, en buena parte desconstitucionalizado. Los nuevos Estatutos, o Estatutos de ¿segunda generación¿, surgidos de las reformas emprendidas por diversas CCAA a partir de 2006, reflejan una nueva etapa en el proceso de descentralización del Estado, y no sólo una modificación de alguna de sus normas territoriales. El título de este trabajo se pregunta precisamente si estos nuevos desarrollos hacen más reconocible la Constitución, como fuente inspiradora y posibilista, o por el contrario la separan más del desarrollo territorial. Los Estatutos de Autonomía forman la parte esencial del estudio realizado, particularmente los textos reformados desde 2006 y sus contenidos desconstitucionalizados, con el catalán en primera línea. También el trascendental papel del Tribunal Constitucional y de su jurisprudencia sobre la estructura territorial del Estado, singularmente en sus últimos pronunciamientos al respecto. Finalmente, la mirada hacia otros Estados compuestos y hacia la UE. En el primer caso, parece necesario conocer las respuestas dadas más allá de nuestras fronteras a las tensiones centrífugas y centrípetas, que no son privativas de nuestro Estado Autonómico. Respecto a Europa, su proceso de integración se está produciendo en paralelo a los diferentes procesos de descentralización en algunos de los 27 Estados miembros. Además, el Tratado de Lisboa ha acercado de nuevo el inacabado debate sobre la integración regional, particularmente de aquellas regiones con competencias legislativas, y ha dado nuevo impulso al principio de subsidiariedad.