La estetica de lo feo en las pinturas negras de Goya

  1. MUÑOZ ALMANZAR, DUSTIN ALEXANDRO
Zuzendaria:
  1. José Ignacio Galparsoro Ruiz Zuzendaria

Defentsa unibertsitatea: Universidad del País Vasco - Euskal Herriko Unibertsitatea

Fecha de defensa: 2013(e)ko azaroa-(a)k 14

Epaimahaia:
  1. Valeriano Bozal Fernández Presidentea
  2. Jesús María González de Zárate Idazkaria
  3. Víctor Gómez Pin Kidea
  4. Xavier Puig Peñalosa Kidea
  5. María Jesús Uriz Pemán Kidea
Saila:
  1. Filosofia

Mota: Tesia

Teseo: 116498 DIALNET

Laburpena

Las Pinturas Negras de Goya están fundamentadas en la estética de lo feo. En esta investigación lo feo ocupa un espacio propio e independiente de la belleza y no se reduce a una condición negativa de lo bello. Así las Pinturas Negras depositarias de figuras de extraños aspectos, formalmente feas, pertenecientes a un mundo verosímil que se encuentra más allá de la mímesis, generan experiencias estéticas. Experiencias que son posibles debido a la mediación del arte, que atrapa al espectador con los recursos de la plástica. Goya pudo abordar en este conjunto la fealdad en sí, tocando temas eternos al tratar problemas cruciales de la existencia humana: el conflicto existencial de la violencia que genera la destrucción del hombre por el hombre y el conflicto existencial interno de la autodestrucción que genera el tiempo y que se concretiza con la inevitable muerte. Y los aborda estudiando y plasmando la fealdad formal, con la que deja como legado para la posteridad una propuesta para el cultivo y desarrollo de la fealdad artística. Las imágenes representadas en estas obras constituyen en su forma figuras convencionalmente feas en el mundo natural. Ellas muestran el traspaso de objetos desagradables de la naturaleza a imágenes desagradables que producen placer en la obra. En esta reflexión queda descartada la posibilidad de que, en la categoría de la pintura, artistas inexpertos técnicamente logren el giro transformador que hace posible que el objeto naturalmente feo genere experiencia estética cuando está plasmado en una pintura. Las Pinturas Negras exigen de cada espectador un trabajo propio de construcción significativa, y el placer que recibe el público al contemplarlas es el de las obras por las obras mismas; que sólo por el dominio de los recursos de la plástica pudo Goya producir el diálogo entre ellas y el espectador.